El Simio Guardián es sin duda uno de los jefes más brutales y que más intimidan de todo Sekiro Shadows Die Twice. El encuentro es bastante duro, pero con la estrategia correcta se vuelve bastante asumible.
Pero eso sí, lo que no te quita nadie es que va a ser un combate muy longevo y agotador en el que tendrás que poner toda tu atención, porque cualquier error se pagará caro.
Tabla de Contenidos
Esto es Sekiro: Prepárate para la Batalla
Prepararse bien para la batalla será algo fundamental, como ya hemos ido comentando en los anteriores jefes (como por ejemplo Genichiro Ashina). Te recomiendo que antes de venir a este jefe, te hayas pasado primero toda la zona del Templo Senpo, incluyendo al «jefe» final de la zona: Los Monos del Biombo.
Farmea antes del combate unas cuantas monedas para así adquirir montones de Emblemas Espirituales, que te van a venir muy bien sobretodo para la segunda fase del encuentro. Te recomiendo que hasta que no le veas futuro al encuentro (llegar con normalidad al menos a fase dos y comenzar a comprenderla) no gastes los Emblemas, para así ahorrar un poco.
En cuanto a Herramientas de Prótesis, te recomiendo llevar el Conducto Llameante (con resorte a ser posible) y los Shuriken (lo máximo que hayas conseguido mejorarlos), yo fui con el Kunai Fantasma, que son los proyectiles que lanza la Dama Mariposa, incluyendo las bolitas blancas (vienen muy bien).
Y respecto a habilidades y Artes útiles para este combate, más allá de las típicas… te vendrá muy bien la Habilidad de Artes de Prótesis con la que puedes realizar un poderoso ataque mientras utilizas el gancho.
Ah, y casi se me olvida, llévate Antídoto en Polvo, que el jefe tiene ataques venenosos.
Cómo Derrotar al Simio Guardián
El Simio Guardián destaca por sus poderosos ataques y por sus combos, en ocasiones, casi infinitos. Por lo cual, la estrategia va a ser algo parecida a la que comentamos en la guía del Toro Llameante: Correr como si no hubiera un mañana.
Este combate consta de dos fases. Sí, que raro, un jefe que al final resulta que tiene más vidas de las que se supone que tiene, no lo hemos visto ya varias veces, no…
Primera fase
La Estrategia consiste en correr constantemente para evitar sus poderosos ataques y solo atacarle tras ciertos de los Ataques del Simio. Este es un buen modo de no recibir demasiado daño del simio, seguramente haya estrategias más rápidas, pero más seguras no creo.
- Verás que el Simio Guardián a veces finaliza sus golpes quedándose sentado (ojo que a veces continuará con más ataques, asegúrate de que ha terminado). En ese momento puedes aprovechar para saltar y darle un par de golpes en el aire para acto seguido volver a correr.
- Otras veces en lugar de terminar al sentarse, este seguirá atacando. Una de las posibilidades es que comience a dar varios golpes y para terminar este se lance hacia ti en plancha. Apártate para que no caiga contra ti y en cuanto haya caído al suelo lánzate al ataque y no pares de golpearle. Puede parecer algo arriesgado, pero verás que la gran mayoría de veces conseguirás aturdirle para seguir dañándole hasta que al final se mosqueará y se irá por patas.
- Ocasionalmente se lanzará directamente en plancha sin haber realizado previamente un combo, solo que en esta ocasión será una versión mejorada de ese ataque e incluirá el Kanji Rojo, no sé si se podrá hacer un contraataque Mikiri aquí o no, yo no lo conseguí. Así que te recomiendo que hagas exactamente lo mismo que en el punto anterior, esquivas el ataque y le atacas sin cesar para aturdirle.
- Demasiado a menudo, le dará por alejarse, y en la gran mayoría de veces, esto significa que va a defecarse en la mano para tirarte su mojón en toda la cara. Este es un ataque con una potencia increíble y como te pille en el aire lo más seguro es que no lo cuentes, así que ni se te ocurra saltar. Para esquivarlo basta con no parar de correr, y si además, corres hacia él… mucho mejor, ya que tras el ataque quedará un rato aturdido debido al escozor de su ano y podrás aprovechar para atacarle de gratis.
- También puede ponerse a rugir al separarse, momento en el que si somos rápidos podremos utilizar el gancho en él para propinarle algunos ataques.
- Puntualmente verás que se revuelca en el suelo, mientras lo haces y si lo calculas muy bien, puedes ponerte por la zona de su cabeza y preparar un Ichimonji, cuesta un poco pillarle el punto, pero se puede.
- Y cuidado, que si pasas demasiado tiempo cerca de sus nalgas, este probablemente te suelte una flatulencia de tal potencia que incluso envenena. Ten a mano el Polvo de Antídoto por si no reaccionas a tiempo.
Con un poco de paciencia le acabarás asestando el golpe mortal. Ahora solo espera, que lo que va a ocurrir a continuación es mágico.
Segunda fase
Los ataques del Simio Guardián cambiarán completamente durante la segunda fase, de todos modos la estrategia es la misma: Correr sin parar y atacar en el momento adecuado. Recuerda que debes reservar tus Emblemas Espirituales para esta fase, que es más difícil.
Lo primero que debes hacer es tal cual el jefe se levanta, darle con tu Conducto Llameante con Resorte para quitarle algo de daño y quemarle, tras eso, dale algún golpe entre que está aturdido y aléjate para comenzar a correr.
De nuevo, estos son los momentos en los que puedes atacar. De todos modos, que sepas que aquí no podrás atacar tanto, lo suyo es darle dos o tres golpes y salir por patas.
- Cuando realice una especie de contoneo y lance un único ataque muy bajo hacia ti con la Katana, es el mejor momento para atacarle. Debes saltar para caer sobre él y atacarle en el aire, te dará tiempo a darle algún golpe en el suelo. No ataques demasiado o te comerás uno de sus ataques.
- Muy a menudo verás que se para y comienza a chillar, debes alejarte rápidamente de él. Este ataque causa mucho daño, tiene un enorme alcance en redonda y además aumenta tu barra de terror, por lo cual te conviene llevar contigo algún agente pacificador por si acaso.
- Pasa completamente de sus ataques de Kanji Rojo, esquívalos siempre y no intentes atacar después.
- Otras veces le dará por realizar un combo de espadazos bajos en lugar de solo uno, el combo consiste en 4 ataques. Tras el cuarto puedes atacarle un poco, pero en esta ocasión bastante poco, salta hacia él, dale un par de golpes en el aire y retrocede para seguir corriendo.
- Recuerda que tienes a tu disposición los Shuriken para sacarle algo de daño extra, no escatimes en Shuriken, sobretodo si la cosa tiene futuro.
Si lo haces bien acabará cayendo, te va a llevar bastante tiempo, pero es un método muy seguro y lo más probable es que incluso te sobren Calabazas Curativas. Una estrategia muy defensiva, pero también muy efectiva.
Recompensa
Esto es lo que obtendremos tras derrotar al Simio Guardián:
- Recuerdos del Simio Guardián.
- Dedo Delgado, para desbloquear una nueva Herramienta de Prótesis.
- Logro: Simio Guardián.
Una recompensa digna de un buen jefe sin duda, te lo has ganado.
¡Y eso es todo! ¿Ya has vencido al Simio Guardián de Sekiro? ¿Cómo lo hiciste tú? ¿Te ha gustado este jefe? ¡Deja tu comentario!